jueves, 4 de febrero de 2016

Capucha y bufanda de flor

La capucha y cuello de para niño del post anterior ha resultado un éxito total y me ha llevado al siguiente proyecto que os presento hoy, una capucha con bufanda para adulto.


Para la capucha de niños, prefiero hacer cuellos, porque creo que son más cómodos para ellos. No tienen que enrollarlas al cuello, no hay peligro de que se enganchen con nada o que las lleven colgando y las pisen, en fin, con los niños ya se sabe y es mejor prevenir que curar.
En cambio, para adultos, esta opción de bufanda me parece más acertada, porque se puede enrollar de varias maneras a gusto del consumidor



De todas formas, ambas maneras de hacer estas capuchas, resulta igualmente bonita, así que se puede elegir cualquiera de las dos.
Al ser para adulto, he cambiado las orejas por una vistosa flor de color crudo y, para que resalte, he hecho la capucha en un tono verde oscuro que me parece muy bonito y muy adecuado para el invierno.


La bufanda es laaaaaarga, larga, para que no entre ni un poquito de aire y, igual que en el modelo del zorro, si no se quiere llevar la capucha puesta, se puede dejar colgando detrás y es muy práctico.
Espero que podamos disfrutar pronto del frío, porque en Barcelona, se está haciendo esperar bastante.


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