¡Cómo me gusta el efecto de este turbante! Nos hace parecer actrices del Hollywood de los años 40.
Además de recoger el pelo y mantener las orejas calentitas, que eso es una virtud que no debemos despreciar.
Se pueden hacer de varios tipos, a mi me gusta mucho este modelo en forma de lazo que se adapta a todo el mundo. Se pueden mezclar colores y hacer que contrasten, o que sean de la misma gama pero diferente tono, eso, ya lo dejo al gusto del consumidor.
Lo importante es apuntarse a la tendencia de este invierno y no dejar de llevar estos turbantes tan de moda, para todas las edades.
Los he visto en un montón de tiendas, de las que todos conocemos y en las que acabamos picando, pero, si de verdad queréis algo único, la alternativa artesanal es vuestra opción, porque cada pieza lleva parte del tiempo de otra persona, tejida con cariño y esmero y eso, no puede copiarlo ninguna gran empresa.
